LA RADIO 26/2/2012

Para mi primera salida en serio con la flaca, decido ir por las carreteras de la comarca de las vegas que serán testigo de mi bautizo con la bicicleta de carretera. Durante el trayecto afrontaremos la subida a La Radio, una pequeña estribación al oeste de Morata de Tajuña, que muchos cicloturistas utilizan para medir sus fuerzas, además también ascenderemos el Alto de la Marañosa por sus dos vertientes.

Desde hace mucho tiempo rondaba por mi mente la idea de adquirir una bicicleta de carretera. Me hacia mucha ilusión tener una flaca para emular a los ciclistas profesionales. Hace apenas un par de semanas que la tengo, y estoy encantado con ella. Hasta hoy solo había salido un par de veces, lo justo para probarla y adaptarme a la posición. Hoy me enfrentaba a mi primera salida importante.




A partir de ahora simultaneare ambas modalidades: el ciclismo de carretera y el MTB según me apetezca. Siempre me ha tirado la carretera y reconozco que me siento muy a gusto circulando por el asfalto, aunque por supuesto soy consciente del peligro que entraña circular por vías abiertas al trafico motorizado. Es algo que no debemos olvidar si realmente queremos sentirnos seguros a la hora de practicar el deporte que mas nos gusta. Ciclistas, peatones y vehículos tenemos que respetar las normas tanto cívicas como reglamentarias. De esta forma todos juntos conseguiremos dar un paso adelante en materia de seguridad vial.

Sobre las 9,15 iniciamos la ruta. Mi amigo Pequeño me acompaña en mi bautismo. El también posee bicicleta de carretera. Su experiencia y sus consejos me serán de mucha ayuda para iniciarme en el mundo del ciclismo de carretera. La zona sur de Madrid es un hervidero de autopistas, autovías, y nudos de enlace que casi siempre se encuentran saturadas por multitud de vehículos. La mejor opción es salir los fines de semana por las carreteras de la comarca de las vegas y sus carriles bici.




Los primeros kms nos van alejando de Getafe atravesando los barrios de El Bercial y Getafe Norte siempre utilizando los carriles bici correspondientes. A continuación  pasamos por el póligono industrial Los Ángeles, al ser domingo no encontramos ningún movimiento de mercancías. Tenemos toda las calles a nuestra disposición, un lujazo. En menos de media hora nos plantamos en Perales del río, donde cogemos el carril bici de San Martín de la Vega. Antes de alcanzar el Alto de la Marañosa se unen a nosotros un par de ciclistas, que al ver que llevábamos un ritmillo bueno deciden seguirnos. Esta compañía nos vendrá muy bien. Los cuatro entramos a relevos y vamos dialogando, como si nos conociéramos de toda la vida. Es admirable la camaradería en el mundo del ciclismo.

Ascenso al Alto de la Marañosa.

Esta es la primera ruta importante que realizo desde que en octubre colgara la bici en el trastero por una lamentable lesión en mi rodilla. Han sido cuatro meses de inactividad, que me han servido no solo para reposar y recuperarme (aunque no del todo). Sino para recargar las energías y sobre todo la motivación esencial para seguir montando en bicicleta. Este año espero estar a la altura de las grandes rutas y carreras que pienso realizar. Pero por encima de esto quiero disfrutar y pasarlo bien junto a mis amigos.




La bici de carretera es otro mundo. Tiene sus pros y sus contras, como todo en la vida, pero con tan solo un par de salidas me ha conquistado para siempre. Es claramente mas incomoda que una btt, pero ha medida que vas montando esta sensación comienza a desaparecer. Llaneando es espectacular, puedes ir muy rápido sin apenas hacer esfuerzo. Metes plato y enseguida la bici responde. La postura incita a levantarte de la bici y hacerla bailar de vez en cuando, en esta situación la ligereza de la montura la hace moverse y desplazarse a mucha velocidad. En la subida a la Marañosa no fuerzo, prefiero ser cauto y guardar energías para el resto de la ruta. Son cuatro meses sin coger la bici y lógicamente me falta mucho para adquirir una buena forma física.

Nuestros dos nuevos compañeros son unos auténticos jabatos. Tiran de nosotros como mulas. En el descenso del Alto de la Marañosa me lanzo a "tumba abierta", alcanzando velocidades muy altas. El plato grande y los piñones pequeños te permiten ir dando caña incluso en descensos prolongados. En la glorieta de la Warner nos abandona el compañero del maillot "peugeot", este decide ir dirección Pinto. El que lleva el maillot "danone" nos instiga a perseguirle. Nos grita "pa La Radio chicos". Curiosamente coincide con nuestros planes así que decidimos seguirle.




Puente sobre el rio Jarama


Poco después abandonamos el carril-bici para incorporarnos a la M-506. A partir de aquí tendremos que circular con precaución, por el arcén, bien ceñidos al borde derecho. Antes de llegar a la glorieta para coger dirección Arganda tenemos que superar el puente que cruza el río Jarama. Desde este punto podemos contemplar en todo su esplendor, casi 1.500 kms cuadrados de campiñas, vegas y paramos que conforman parte de la comarca de las vegas. Por esta zona Pequeño impone un fuerte ritmo que apenas podemos seguir.

Este tramo de la ruta fue el mas soso, circulando por una carretera desierta, donde el único aliciente lo teníamos en visualizar allá a lo lejos la subida a La Radio, esta comienza al girar en una glorieta tomando la M-311 en dirección Morata de Tajuña. Por esta zona nos cruzamos con multitud de grupos de ciclistas, que como nosotros disfrutaban de una estupenda mañana. La afición por el ciclismo esta en alza, pocos deportes gozan de tan buena salud como el de las dos ruedas, sean finas o gordas. Estas carreteras son transitadas por cicloturistas en su mayoría, aunque de vez en cuando algunos afortunados se hayan cruzado con el campeón, Alberto Contador, entrenando por la zona.



Perfil de La Radio cortesia de: http://www.tresplatos.com/


En seguida comenzamos el ascenso al monte "El Alto", mas conocido por el nombre de La Radio. Es una subida suave y tendida durante sus primeros 3 kms. El mas interesante es el ultimo, con rampas que llegan al 7% de desnivel máximo. Justo al comenzar la zona dura vemos en el margen izquierdo de la calzada a varios moteros detenidos, auxiliando a uno de sus compañeros que se encontraba tendido en el suelo. Por lo visto momentos antes había sufrido un accidente. El repecho final lo hacemos cada uno a nuestro ritmo, por suerte el carril de trafico lento nos refugia del poco trafico existente. El "danone", un joven de mas de 60 años en seguida nos abandona, un experimentado ciclista que conoce a fondo estas pequeñas subidas. Por contra me sorprendió Pequeño que en el tramo mas complicado se quedo por detrás, esperaba mas de el.

Me había preguntado muchas veces como seria ascender un puerto con la flaca. Y aunque La Radio no es precisamente el Tourmalet, si que me puede servir como orientación. Desde luego no tiene nada que ver con la btt. Las sensaciones son muy distintas. La fuerza de la pedalada se transmite rápidamente haciendo que la bicicleta vuele. Me puedo poner en la punta del sillín e imprimir mucha potencia mientras agarro el manillar por arriba, en clara posición de escalada. Es una gozada.



Cuando me levanto del sillín, la bici comienza a bailar de maravilla, como si hubiéramos sido pareja de baile durante años. Sin embargo, hay que estar fuerte para mantener los desarrollos que tiene una bicicleta de carretera, en la mía un plato compac de 34x50 y piñones 12-28. Pero para un principiante en plena pre temporada, como yo, estos desarrollos pueden resultar escasos. Por suerte en la cima aun me quedaban un par de coronas por meter. Pero en un puerto mas serio tipo Morcuera o Navacerrada imagino que podría quedarme colgado a la mitad, echando de menos el plato pequeño y las paelleras de piñones que tienen las bicis de MTB.

La cima de La Radio esta coronada por una gasolinera y el restaurante "El Alto" donde nos despedimos del "danone" que prosiguió rumbo a Chinchon. Nosotros hicimos una pequeña parada, apenas diez minutos, lo justo para rellenar bidones y hacer algunos estiramientos. La ruta continuo por la M-302 una carretera que nos acerca a la finca de Valgrande a través de unas duras rampas del 9%, por suerte solo fueron unos 600 metros, pero nos hicieron sufrir.




A continuación nos dispusimos a realizar un rápido descenso de casi 4 kms, hasta alcanzar la urbanizacion Vallequillas. Hay que tener cuidado con la flaca en los descensos. Esta se "encabrona" en seguida cogiendo velocidades muy altas si queremos. Traza las curvas de forma espectacular, con tan solo inclinarnos un poco la bici responde y sigue la trayectoria deseada. En este sentido el viento se convierte en el enemigo mas peligroso. En las bajadas cualquier ráfaga te puede dar un fuerte bandazo y dejarte caer.

Al llegar de nuevo al puente sobre el río Jarama, me pongo delante para incrementar el ritmo. Fueron unos kms donde lo dimos todo, haciendo relevos, alternándonos en la cabeza para sufrir lo menos posible el fuerte viento que acechaba por esta zona. Pronto alcanzamos el carril bici de San Martín de la Vega. A partir de aquí volvemos a transitar protegidos del trafico, un enorme muro de hormigón separa la carretera del carril exclusivo para ciclistas. El siguiente punto interesante de la ruta es el ascenso al Alto de la Marañosa.



En esta ascensión constato que Pequeño no se encuentra bien. La Marañosa por esta vertiente es una suave subida pero muy constante en sus 3,5 kms iniciales. El ultimo km las rampas llegan en algún punto al 6% de desnivel, es precisamente aquí donde mi colega comienza a pasarlo mal. La fatiga se apodera de el. En la cima le espero mientras intento resetear el garmin que me estaba dando problemas con la función del pulsometro. El resto de la ruta fue compartiendo el mismo recorrido que la ida. Rápido descenso de la Marañosa hasta llegar a la glorieta que nos hace entrar en el termino municipal de Getafe. Hemos pasado el arroyo culebro y el Convento de las Carmelitas, en seguida llegamos a Perales del Río, sin entrar en el barrio giro a la izquierda para abandonar el carril-bici ya en dirección Cerro de los Ángeles.




Tramo entre Perales del Rio y el Cerro de los Angeles

En el descenso nos juntamos con dos bikers. Me llamo la atención uno de ellos que iba con bici de doble suspension y con neumáticos finos, los llamados "slits".Juntos realizamos buena parte del resto de la ruta, intercambiando experiencias y charlando sobre el mundo del ciclismo. Gracias a su compañía se me hizo muy ameno el recorrido entre Perales del Río y El Cerro de los Ángeles. Terreno que considero de lo mas "pestoso" por el fuerte viento que sopla de cara y la pendiente siempre tirando hacia arriba.





Llegada al barrio de El Bercial

Sobre las 12,45 alcanzamos el barrio de El Bercial, dando por finalizada la ruta, después de 76 kms realizados en 3h 20m (tiempo encima de la bici) a una media de 23 km/h. Mi primera ruta con la flaca ha sido una experiencia muy gratificante. Físicamente me he encontrado mejor de lo esperado, teniendo en cuenta la larga inactividad. Creo que los 12 kg que he adelgazado han tenido mucho que ver. Seguiré mejorando la forma acudiendo al gim, corriendo, montando en bici, haciendo dieta y por supuesto cuidándome mucho las rodillas.



PERFIL:

TRACK DE LA RUTA: