Llegando a la Puebla de la Sierra. |
A una semana escasa de la celebración de la Marcha Sierra Norte, en la cuál estaba inscrito desde hace meses, me decido a realizar esta ruta que pretendía discurrir por los últimos 100 kms que se disputan de dicha carrera. Sin embargo compromisos familiares aun sin confirmar me tenían en ascuas sin saber si finalmente podría ser de la partida el próximo domingo. En este plan me propuse hacer de esta ruta un buen test y calibrar mis fuerzas de cara al evento, así de esta forma podía ver y sufrir "in situ" parte del recorrido de esta marcha y si por el contrario al final no pudiera asistir siempre me quedaría la satisfacción personal de rodar y conocer una zona que no suelo frecuentar y que sin embargo me encanta y que descubrimos unos años atrás en la ruta: "Descubriendo la Sierra del Rincón".
Presa de El Villar. |
Esta vez me acompañaba mi colega Marco, una buena máquina que llegaba en plena forma gracias a que estos últimos meses estaba entrenando fuerte para llegar a tope a la Pax Avant que se celebrará a principios de junio en Isaba, Navarra. El punto de inicio de la ruta estaba situado en El Berrueco, un pueblo en fiestas que al entrar en él rezumaba un fuerte olor a alcohol y pis, vestigios de una noche seguramente muy larga. Algunos chavales mientras apuraban el botellón debieron quedarse alucinados cuando nos vieron encima de las bicis echar a rodar sobre las nueve de la mañana y ellos aún pretendían alargar más la noche. Como cambiamos con la edad.
Subiendo el Alto de Matachines. |
Los primeros kms se hacen muy molestos debido al fuerte viento de cara que tenemos que soportar, en realidad durante la primera mitad de la ruta nos estuvo azotando de lo lindo. Mientras sufríamos para avanzar lentamente por terreno casi siempre llano podíamos deleitarnos con un paisaje presidido por los embalses de El Atazar, el más grande de la Comunidad de Madrid y el embalse de El Villar a cuya presa llegamos a los ocho kms de comenzar la ruta. El día había amanecido con una temperatura muy agradable que invitaba a vestir de corto sin embargo las nubes presentes durante las primeras horas no dejaban salir al sol, dejando una sensación de bochorno. Poco después iniciamos el ascenso al Alto de Matachines, también conocido con el nombre de Collado de la Fragüela. En realidad hablar de ascenso de puertos, propiamente dichos, en esta ruta es un poco absurdo, porque toda la ruta es un continuo subir y bajar sin encontrar en verdad más de tres kms seguidos de terreno llano.
Pendiente del 14%. |
Situando el comienzo de la ascensión en el cruce de Robledillo con Cervera de Buitrago hasta que la carretera deja de picar para arriba estaríamos hablando de un puerto de unos 7 kms de longitud. Con una primera parte de unos 4 kms que se hacen cómodos por buen asfalto hasta llegar a Robledillo de la Jara donde la situación cambia radicalmente. En esta pequeña aldea tomamos dirección La Puebla por la M-130, una carretera de montaña como así se indica en un cartel informativo que nos hace intuir que las condiciones del piso van a cambiar y mucho. Los últimos dos kms de subida son terroríficos con pendientes que rozan el 13% de desnivel localizados en alguna curva de herradura siempre persiguiendo las siluetas de unas enormes antenas que nos indican el final de la subida.
La sierra del Rincón. |
El siguiente tramo de la ruta es simplemente espectacular. Puro caviar ruso beluga para cualquier ciclista que le guste la naturaleza. La carretera se adentra en el valle serpenteando las montañas por un desfiladero que en ocasiones mirarlo da miedo. Nos encontramos inmersos en la mal llamada "sierra pobre", también conocida como la Sierra del Rincón. Montañas rocosas, jaras en flor, cuarcitas en aristas, rocas de pizarra adornan un lugar tan salvaje y abrupto como bello y tranquilo. Decir que las vistas y el entorno son de flipar es quedarse corto. Fueron 15 kms donde nuestros sentidos se quedaron prendados de este hermoso paisaje. Por contra por aquí nos encontramos un trazado completamente rompe piernas, con continuas subidas y bajas que se hacían muy peligrosas por el mal estado del firme. Circulando por una carretera estrecha, agrietada, derruida y con socavones en algunos puntos concretos que de meter la rueda en ellos seguramente supondría la caída al suelo. Por esta zona nos encontramos las pendientes más duras, algunas cercanas al 15%, y tan solo nos cruzamos con un vehículo.
Con Marco. Puebla de la Sierra. |
Llevados 32 kms llegamos a La Puebla de la Sierra, una pequeña pedanía que ha sabido mantener intacta su arquitectura rural y la naturaleza de su entorno. En la plaza del pueblo hicimos la única parada de toda la ruta. Apenas diez minutos que nos sirvieron para hacer estiramientos, cargar agua en una fuente cercana y conseguir que la única persona que encontramos en todo el pueblo nos hiciera la foto juntos. Un precioso pueblo fantasma de la España profunda que los inviernos debe sufrir un aislamiento total. Antes de iniciar el ascenso al segundo puerto me tomo un gel y una barrita para recuperar el resuello. El anterior tramo me había resultado muy duro y había tenido un pequeño amago de calambre en el cuadriceps derecho. Por suerte se quedó en solo un amago y durante el resto de la ruta no volví a tener problemas musculares.
Ascendiendo el Puerto de La Puebla. |
En seguida reanudamos la marcha rumbo hacía el puerto de La Puebla. Hoy Marco se encontraba fuerte y cada vez que la carretera se empinaba quería demostrar su potencial y en esta subida no iba a ser menos. A las primeras de cambio se puso por delante y a tirar. Yo por contra decido no cebarme detrás de él y prefiero seguir a mi ritmo que tampoco era malo. Desde el comienzo del puerto podemos observar desde abajo la cumbre que se encuentra coronada también por unas antenas. Esto nos puede servir como referencia para ir dosificando nuestras fuerzas. La primera parte de la ascensión se hace bastante cómoda transitando por varias rectas con pendientes constantes entre el 6% y el 8%, aunque también nos encontraremos algún falso llano. La parte final es la más vistosa, cuando la carretera se va adentrando en la montaña a través de varias curvas de herradura donde hallaremos los porcentajes más altos, con algunas rampas por encima de los dos dígitos.
Puerto de la Puebla. |
Coroné el puerto con un tiempo de 46 minutos, posiblemente un par de minutos más tarde que mi compañero, pero 18 minutos mejor que hace tres años cuando ascendí por primera vez este puerto, aunque en aquella ocasión la realicé con bici btt, pero esto es lo de menos. Además de ser una subida ya de por si dura, el viento también incluyo negativamente, cada vez que la carretera cambiaba el sentido de la dirección y nos posicionábamos en contra del aire, el azote de esté nos hacía sufrir el doble. En la cima nos detuvimos lo justo para hacer las fotos de rigor y contemplar el espectacular paisaje que se abre tanto a la derecha como a la izquierda. Imperdonable llegar hasta aquí y no dedicar unos instantes a admirar tan bello lugar.
Cima puerto de la Puebla. |
Se trata de una subida muy interesante y bonita que consta de 9 kms de longitud, donde tendremos que salvar un desnivel positivo de 518 metros. Tiene una pendiente media superior al 5% y máxima del 11% localizada en alguna curva de herradura. Personalmente disfrute mucho de la ascensión de este puerto, no solo por el espectacular panorama que podíamos observar a nuestro alrededor sino porque también me encontré con muy buenas sensaciones. Física y mentalmente fuerte fui controlando mi ritmo en todo momento para no llegar fatigado y con las pulsaciones contenidas. Acto seguido nos tiramos en un corto descenso que finaliza repentinamente después de cuatro kms y de dejar atrás dos cruces, uno que nos llevaría hasta Pradena y otro hasta Montejo. Nosotros enlazamos con el último km de subida al puerto de la Hiruela, y al llegar a su cima tendremos otros 7 kms de prolongado descenso que interrumpimos por un despiste que nos llevo a entrar al parking del pueblo, cosa que no estaba programada.
Por tierras de Guadalajara. |
Al entrar en la provincia de Guadalajara la carretera vuelve a inclinarse para acometer la subida al puerto de El Cardoso. Nos encontramos en tierras manchegas, aunque esta zona no se parece para nada a la Mancha, todo lo contrario, estamos inmersos en plena sierra de Ayllón, circulando por una desierta carretera que se adentra entre extensos bosques cortados por montañas de pizarra. Por aquí nos topamos con una curiosa señal de peligro, no incluida dentro del catálogo del reglamento de circulación, que nos llamó mucho la atención. Con las siluetas de una rana y un lagarto como fauna amenazada. Por aquí ni rastro de vehículos ni vestigios de civilización, tan solo la presencia de las vacas enturbiaban a veces un silencio absoluto que nos hacía escuchar con claridad el discurrir del río Jarama.
Curiosa señal de peligro. |
El puerto de El Cardoso es una subida de casi 10 kms de longitud que discurre por la Gu-187 casi en su totalidad. Una ascensión suave que realizamos tranquilamente contemplando el maravilloso entorno de esta zona. Lo más complicado de la subida esta justo al pasar un puente que supera el río Jarama y que deja a un lado la entrada al famoso Hayedo de Montejo, un bosque mixto compuesto de hayas y robles que es una joya botánica muy recomendable de visitar en primavera u otoño cuando la tonalidad de sus árboles y hojas adquieren su esplendor. El último km de subida es el más duro, este viene precedido de un pequeño tramo de descenso que viene fenomenal para afrontar el siguiente esfuerzo que se hace protegido por unos altísimos árboles que nos acompañan hasta casi coronar. En la cima encontramos el cartel de puerto de montaña en una explanada ya conocida por nosotros.
La compañía. |
Hace un par de años pasamos también por este lugar cuando realizábamos la ruta de: subida al Pico Tres Provincias", aunque esa fue otra historia. El tramo que discurre por Guadalajara subiendo el puerto de El Cardoso me parece bastante asequible, no hay zonas realmente duras. Es un tramo para disfrutar del precioso entorno alejados de cualquier ruido, dejando de lado las poblaciones de La Hiruela y El Cardoso de la Sierra, dos pedanías casi despobladas que adquieren mayor relevancia en los meses estivales con la llegada del turismo rural. Tras rellenar los bidones de agua en una fuente "con agua potable" como así se indica en un cartel, que existe unos metros más adelante, nos lanzamos cuesta abajo.
Puerto de El Cardoso. |
El descenso finaliza cuatro kms después en un cruce de carreteras, hacía la izquierda el puerto de la Hiruela, a la derecha Montejo de la Sierra. Llevamos 70 kms de caminata, es el momento de tomar decisiones. La idea era completar los últimos 100 kms de la Marcha Sierra Norte y dentro de estos estaba incluido el puerto de la Hiruela, sin embargo decidimos atajar por Montejo de la Sierra. Marco llegaba tarde a casa y yo no me encontraba todo lo fuerte que esperaba. Así pues nos dejamos sin ascender el último puerto que suponía agregar otros 6 kms más de subida. De todos modos aun nos quedaba mucha tela que cortar.
Montejo de la Sierra. |
El último tramo de la ruta se hace por carreteras en buenas condiciones y también con escaso tráfico, aunque por esta zona si nos cruzamos con más vehículos, pocos en realidad. Por delante aun tenemos que afrontar casi treinta kms de terreno casi siempre favorable pero también nos encontramos con varios repechos de importancia. Por suerte por aquí el viento soplaba a favor y se convirtió en nuestro principal aliado. Durante este trazado superamos las poblaciones de Montejo de la Sierra, Pradena del Rincón y Mangiron. Antes de llegar a esta última población tuve un pequeño despiste y tomamos un cruce equivocado, teniendo que rectificar metros más delante, lo que supuso agregar casi un km más a la ruta. El paisaje de estos últimos kms tampoco desmerece con unas vistas de impresión a la Sierra de la Cabrera y al embalse de Puentes Viejas.
Presa de Puentes Viejas. |
El paso por la presa de Puentes Viejas se debe hacer previo paro obligatorio marcado por un semáforo. Sin embargo nosotros lo encontramos en verde y pudimos pasar sin detenernos. Los últimos kms los hicimos a tope impulsados por la motivación de terminar la ruta en la hora prevista y también porque nos cruzamos con un grupito de ciclistas que iban marcándose un ritmo muy alto. Sobre las 14,15 llegamos a El Berrueco terminando la ruta en un tiempo de 4h 55m (tiempo encima de la bici) después de realizar 98 kms a una media de 20 km/h. Buenos datos que me dejan satisfecho, sobre todo porque no terminé fundido. Marco parece estar en un buen momento para afrontar sus retos y yo si finalmente la semana que viene puedo asistir a la Marcha Sierra Norte se que lo pasaré mal. Pero ya sabéis que solo fracasa el que no lo intenta.
PERFIL:
TRACK DE LA RUTA:
¡Zona alucinante sí! Que mejor test para la SN que éste. Ahora a completarla (siempre que puedas acabar yendo).
ResponderEliminarNos tienes en ascuas. Al final, ¿llegas a la cita? Espero que sí. Decían que estaban parcheando la carretera para la marcha, pero por lo que dices parece que está incluso peor de lo que estaba la última vez que pasé por allí este invierno. En fin, la suerte está echada. A ver si al final puedes venir y me pongo a rueda :-)
ResponderEliminar