TALAJARA 2013 6/10/2013

La sexta edición de la Talajara B-Pro Bike Maratón que se celebra en Talavera de la Reina y que discurre principalmente por la Vía Verde de la Jara ha sido todo un éxito de participación con más de 4000 bikers inscritos que han podido disfrutar de dos recorridos a elegir entre 80 y 125 kms. Una carrera cicloturista patrocinada por el Corte Inglés que se ha convertido en todo un referente dentro de las marchas no competitivas.

TALAJARA 2013

Un año más y ya van cuatro me he decantado por participar en la marcha corta. Este año me encuentro en peor forma, con siete kgs más que el año pasado por estas fechas. Además el mes de agosto ha sido horrible, sin poder coger la bici debido al periodo de baja que estuve por la ciática, con dolor de espalda. Era toda una temeridad lanzarme a disputar la ruta larga, sin embargo las buenas sensaciones que tuve durante la marcha de Las Rozas y en Dalepedales me hacían presagiar un resultado digno.

Pequeño, Javi y yo.

Al descartar mi participación esta temporada en el Soplao y en La Monegros, la Talajara se convertía en la prueba más importante del año para mi, que no la más dura, por supuesto. Mis amigos y yo tenemos una relación especial con esta carrera (un amor odio, difícil de clasificar). Por unos u otros motivos siempre han sucedido cosas que nos han privado de disfrutar a tope esta marcha. Estaba claro que en mi cuarta participación tenía que sacarme la espina clavada.

Salida en Talavera de la Reina.

Así pues me presento en la linea de salida en Talavera de la Reina junto a Javi y mi colega Pequeño, que adquirió una de las últimas inscripciones que la organización había ofertado. Como en ediciones anteriores la salida estuvo dividida en dos horarios. A las 9,00h se había dado la salida a la marcha larga, con la participación de nuestro colega Marco Granado. A las 10,00h nos dan el banderazo de salida a cerca de 2700 participantes, un pelotón gigantesco que ocupa toda la avenida principal del recinto ferial.

Un buen madrugón nos había permitido situarnos entre los primeros cuatrocientos, cerca del tercer arco publicitario. Antes de salir los tres habíamos acordado la estrategia a seguir: Cada uno a su ritmo. Nada más pasar el arco de salida me pongo adelantar gente, de todos modos Pequeño me había comentado que durante los primeros kms, que se hacen por las calles de Talavera iba a ir rápido para ganar algún puesto. Me pareció raro al salir de la zona urbana no tenerle detrás. Nada más entrar en los caminos de tierra un enorme charco, que ocupaba todo el ancho, nos da la bienvenida. Esto iba a ser una constante durante los primeros 20 kms. Las lluvias caídas hace pocos días habían dejado este primer tramo con muchos charcos y con varias zonas de barro.

Otros años normalmente estos caminos están en perfecto estado y se pueden desarrollar velocidades muy altas al ser un trazado llano. Hoy a consecuencia del mal estado del terreno se producían constantes tapones, caídas y pinchazos. No es hasta llegar a Calera y Chozas cuando el piso deje de estar complicado. Lamentablemente no pude hacer ninguna foto de los tramos encharcados, me jugaba el físico y las que hice son de zonas aisladas sin barro que no reflejan el mal estado de los caminos.



Coincidiendo con la entrada a la Via Verde, en el km 22, estaba establecido el primer punto de abastecimiento, aunque en este caso solo de agua. Tenía claro que iba a parar un par de minutos, lo justo para hacer un pis y rellenar el bidón. Tiempo suficiente para que me pasara mucha gente pero entre ellos no estaban ni Pequeño ni Javi. Durante el transcurrir por la via verde pongo en practica todo lo aprendido en mi faceta de ciclista. Aprovechando la inercia de unos y de otros, me pongo a rueda para gastar las menos fuerzas posibles. El entrenamiento con la flaca ha dado sus resultados e incluso me permito ir durante mucho tiempo con el plato grande. Circulamos por un terreno compuesto por asfalto derruido y gravilla, ideal para ir muy rápido.

Via verde de la Jara.

La Vía verde de la Jara se asienta sobre un antiguo trazado ferroviario que en realidad nunca se llego a utilizar. Es sin duda la autentica protagonista de la carrera siendo su eje principal. Particularmente me parece la zona más vistosa de toda la marcha. Durante su trayecto tuvimos que atravesar un par de túneles y pasamos junto al apeadero de Silos. El punto culminante se encuentra al superar el embalse de Azutan, un enorme viaducto nos eleva dejándonos contemplar la magnitud del valle del Tajo.

Via verde de la Jara.

En la antigua estación de Aldeanueva de Barbarroya se encontraba el segundo avituallamiento. Este año la organización ha estado a la altura de las circunstancias. Una marcha que pretende ser referente dentro del panorama MTB a nivel nacional debe de tener una infraestructura y un operativo acorde a la magnitud del evento. En este aspecto han estado notables. A lo largo del recorrido había varios puntos de asistencia mecánica y sanitaria. También hay que destacar lo completos que han sido los avituallamientos con multitud de frutas, dulces, agua en aljibes como en otras ediciones, bebidas isotónicas, quesitos, barritas energéticas, todo muy bien planificado para que todo corredor recogiera lo necesario y no se producieran demoras.

Avituallamiento en Aldeanueva de Barbarroya.

Alcanzo este punto bastante entero, habiendo reservado fuerzas que seguramente más adelante me hagan falta, pero con la sensación de haber ido muy rápido. En apenas hora y media me había zampado los primeros 38 kms de marcha, lo que supone una media de casi 25 km/h. Cuando uno participa por cuarta vez consecutiva en una carrera que tiene el mismo recorrido y edición tras edición va mejorando sus tiempos es evidente que el objetivo tiene que ser mucho más ambicioso. Esta vez el plan era no solo mejorar mi mejor marca en esta carrera sino hacer un buen resultado. Llegar antes de las tres de la tarde y hacer una buena clasificación. Sabía que no estaba en mi mejor momento de forma pero aun así me encontraba fuerte, dispuesto a disfrutar de un día de competición contra mi mismo.

Atravesando el Embalse de Azutan.

La táctica a seguir era parar en todos los avituallamientos pero el tiempo imprescindible, que el total de minutos no superara el cuarto de hora entre todas las detenciones. Así pues en este avituallamiento estuve tan solo 5 minutos. Rellenar el bidón, beber un refresco de naranja y sentarme un minuto a comer un plátano mientras me flipaba viendo una banda de percusión que amenizaba el paso de los ciclistas, realmente me pareció muy curioso. Otro punto positivo para esta Talajara 2013.


En seguida me pongo en marcha, abandonando la Via Verde para entrar en la parte más dura del recorrido. La experiencia de haber realizado esta marcha en otras ocasiones te otorga la sabiduría y el conocimiento necesario para afrontarla en condiciones optimas. Uno ya tiene estudiado el trazado y sabe donde tiene que arriesgar y donde ir más al relentí. Los siguientes 20 kms hasta llegar a Alcaudete de la Jara en mi opinión son los más complicados. Nos encontraremos con un terreno pedregoso y agrietado.



Un trazado rompe piernas, con continuas subidas y bajadas que se pueden hacer muy duros si equivocamos el ritmo a llevar. Yo me lo tome con tranquilidad, apretando en las subidas y estando muy atento en las bajadas que eran algo peligrosas, en especial una que existe antes de llegar a Belvis de la Jara. El paso por esta población siempre es muy especial. Los vecinos se echan a la calle y aplauden a rabiar a todos los ciclistas. El primer año que participé en esta carrera en este pueblo nos obsequiaron con la "jarasca" el guiso típico de la zona.


A continuación tuvimos que afrontar un par de repechos de consideración, con pendientes que llegaban al 10% de desnivel, donde más de uno ya puso pie a tierra. Era la antesala de la ascensión "estrella" del día. La subida al Alto del Burro. Aquí la mayoría de la gente puso pie a tierra y la completaron realizando empuja-bike, los escasos cuatrocientos metros de escalada. No vi a nadie hacerla encima de la bici, aunque después me comentaron que hubo algún intrépido que lo consiguió.

Alto del Burro.

Personalmente me parece absurdo mal gastar fuerzas en esta subida donde la pendiente, que llega a superar el 20% en algún momento, el mal estado del terreno con enormes pedrolos y la cantidad de gente amontonada que produce tapones, la hacen prácticamente imposible de salvar. Su cima es el punto más alto de la ruta. Además en este lugar coincidían las dos marchas. Un voluntario de la organización nos iba dando paso dando prioridad a los que venían de la marcha de 125.




Desde aquí cogimos un sendero, algo técnico, siempre en prolongado descenso que solo nos permitía avanzar en fila de a uno. Por esta zona me cruce con un energúmeno que me quería adelantar a toda costa, pretendiendo que yo me saliera de mi trazada para que él pasara por la parte "limpia" del camino. Entiendo que el que quiere adelantar tiene que buscarse las mañas para hacerlo. Muchos avisan de sus intenciones "por la izquierda", "por la derecha", "por el centro", me parece bien. Pero esto no les otorga preferencia, que no pretendan que me desvié de mi trayectoria. El que va por delante va marcando su camino, es el que adelanta el que tiene que desviarse. Yo cuando adelanto nunca pretendo avasallar a nadie. Me parece lamentable estos comportamientos. Por su culpa estuve a punto de irme al suelo.

Alcaudete de la Jara.

Esta rápida bajada desemboca en Alcaudete de la Jara, donde estaba establecido el tercer avituallamiento, solido y liquido. Atravieso el pueblo entre los aplausos de la gente que nos hacen sentirnos casi como unos profesionales. Aquí realizo un rápido pit-stop de escasos 6 minutos que me dieron para rellenar el bidón, beber abundante líquido, comer un plátano, ingerir un gel y realizar estiramientos. También limpié un poco la cadena que desde hacía kms me sonaba a cascajo.



En este sitio se surtían las famosas "migas". No hice ni amago de tomarlas, ni siquiera se me paso por la cabeza. Creo que sería más acertado ofrecerlas al finalizar la marcha. Reanudo la carrera abandonando Alcaudete de la Jara por una pasarela que me hace superar el río Jébalo. Un voluntario me indica el camino a seguir, hacía la izquierda. Puede ser una impresión mía pero en esta edición he visto mucha más presencia de voluntarios, policía local y guardia civil. Pocos metros después me encontré con una unidad de Shimano que amablemente me engrasó la cadena, ya no volví a tener problemas.

Llegando a Membrillo.

A partir de aquí y hasta llegar a meta transitaré por caminos en mejor estado, ni rastro de charcos ni barro. Hasta llegar al próximo avituallamiento tengo por delante 10 kms que se hacen bastante duros por el azote del viento, que por esta zona siempre da de cara. Los primeros 5 kms son de subida tendida, con porcentajes constantes entre el 4% y 6%. Alguna rampa algo más dura pero nada para asustar. Por esta zona veo gente con problemas musculares, hace un par de años yo también los sufrí.



Los siguientes 5 kms son de suave descenso que se realizan por un sendero. Antes de alcanzar Membrillo tendremos que superar un tramo repleto de piedras, son apenas trescientos metros pero se me hacen eternos. No recordaba haber pasado por esta zona tan pestosa en ediciones anteriores. Quizás hayan situado estas piedras con posteridad para mejorar la tracción de los vehículos. En esta aldea estaba situado el último avituallamiento.

Membrillo

Un par de minutos de parada que aproveché para estirar los cuadriceps, comer un plátano y rellenar el bidón en previsión de no detenerme hasta meta. Evalúo mis fuerzas y con agrado contemplo la posibilidad de ir a tope el resto de la carrera. Así fué. Nada más salir de Membrillo meto el plato grande y en seguida comienzo a pasar a gente. Mantengo velocidades por encima de los 30 km/h hasta que llego a las primeras rampas de los Altos de Mechacon. Daba igual, en las subidas también me encontraba "super" superando a gente que ya iba cascada.


Por esta zona estaban situados los puestos fotográficos y muchos bikers ya arrastraban a pie su bici, menuda foto. Al verme tan pletórico ahora sabía que había estado guardado demasiadas fuerzas durante la primera parte de la marcha. Era el momento de demostrar todo mi potencial. Los últimos 18 kms desde Membrillo hasta meta los hice a una media de 22 km/h, muy rápido, durante este tiempo solo me pasaron dos tios y pude adelantar a mucha gente.



Un descenso algo peligroso por las altas velocidades que se pueden coger termina en una larga recta desde donde ya se divisa Talavera de la Reina. Los últimos 8 kms restantes se hacen por terreno llano, alternando caminos de tierra y carreteras asfaltadas. A dúo con otro biker fuimos a relevos durante el tramo final, dándolo todo para llegar lo antes posible. La recta final la hice a tope para rebasar el arco de meta a las 14,34h de la tarde, con un tiempo de 4h 18m (tiempo encima de la bici) a una media de 19 km/h después de realizar 83 kms, tres más de los que anunciaba la organización, como es costumbre por otra parte.

Meta. Talavera de la Reina.

La clasificación final me otorga el puesto 439 con un tiempo de 4h 35m, a más de hora y media del primer clasificado, eso era lo de menos. La prueba corta de 80 kms fue la más multitudinaria, la terminaron 2484, como curiosidad comentar que el último clasificado llego a 4h 44m del vencedor que por segundo año consecutivo fue David Vizcaino Bayón con un tiempo de 2h 56m. Pequeño (puesto 850 con 5h 13m) y Javi (puesto1904 con 6h 28m) llegaron algo más tarde, pero contentos de su actuación.



Mención especial merece Marco Granado (puesto 852 con 7h 46m) que en su primera participación apostó por la marcha larga y terminó en un buen puesto. En el plano personal me quedo muy satisfecho de mi actuación. Considerando que no estaba en mi mejor momento pude conseguir alcanzar mi objetivo, que no era otro que superarme a mi mismo. Mejorando mi mejor registro en casi 35 minutos y alcanzando una posición en la clasificación bastante digna para mi momento actual. Esta vez si he podido quitarme la espina que tenía clavada de anteriores participaciones. Al terminar la prueba me acordé de todos los que este año no han podido asistir. A ellos va dedicada esta narración.

Las malas condiciones del terreno, sobre todo durante los primeros 20 kms, han endurecido este año el recorrido, pudiendo afirmar que ha sido la Talajara más dura de las que he disputado, sin embargo gracias al buen clima y el excelente día soleado que hemos tenido hoy, todos los participantes hemos podido disfrutar de un estupenda jornada de MTB. Con la Talajara cierro el calendario de marchas por este año. El año que viene si puedo volveré a esta carrera que se ha convertido en todo un clásico para nosotros. Seguramente las miras estarán puestas en la marcha larga, porque ya va siendo hora de ir ampliando horizontes.


Video de entrada a meta.

Fotos realizadas por la organización.


CLASIFICACIONES:

PERFIL:

TRACK DE LA RUTA: