Palacio Real de Aranjuez. |
Con las primeras luces del día, a eso de las ocho de la mañana emprendo viaje hacía Aranjuez. Enfundado en mil capas de abrigo, tres pares de guantes, cubre botas y demás atuendos contra el frío voy alejándome de El Bercial sabiendo que me espera una jornada estupenda de ciclismo del bueno, como así me gusta denominarlo. Un día marcado por las gélidas temperaturas que he tenido que soportar, sobre todo durante la primera parte de la ruta. Hasta llegar a Aranjuez el termómetro no ha sido capaz de subir de 5º. Solo la ilusión y las ganas de bicicleta me hacen entrar en calor.
Torrejón de la Calzada. |
Instantes después alcanzo el polígono industrial de la Cantueña, que tengo que atravesar para poder incorporarme a la M-419, una carretera de nueva construcción, con dos carriles para cada sentido y un amplio arcén que utilizaré para resguardarme de los pocos coches que conocen esta vía. Por delante tengo 10 kms, que se me hacen bastante monótonos. Antes de llegar al primero de los "torrejones" abandono esta carretera para coger la M-404. Pronto atravieso Torrejón de la Calzada y dos kms después llego a Torrejón de Velasco que dejo a mi derecha transitando por su circunvalación para no entrar en el núcleo urbano.
Concentración motera en Titulcia. |
Durante los siguientes kms me estuve planteando la opción de recortar el recorrido. El frío era tan intenso que las manos y los pies comenzaban a helarse. Y aunque apenas llovió durante 5 minutos, la amenaza de tormenta siempre estaba ahí. La decisión la tenía que tomar al llegar a Ciempozuelos. Desde este punto retornar a Getafe me suponía tan solo realizar 35 kms más. De seguir con la idea original eran cerca de 80 kms más. Al final pudieron más las ganas y al llegar a la glorieta decidí continuar camino hacía Aranjuez.
Ruta por las Vegas. |
Comentar que me ha llegado información procedente de los foros y de otros amigos blogger-os que por esta zona de Ciempozuelos y sus alrededores se están produciendo robos a ciclistas. Según me comentan se trata de un grupo de gitanos que abordan en plena carretera a los ciclistas con una Ford Transit de color rojo, se cruzan en medio y te arrebatan la bicicleta a la fuerza. Supongo que la policía habrá tomado buena nota de estos sucesos y estará vigilando la zona. En cualquier caso, contra esto poco o nada se puede hacer. Yo suelo entrenar en solitario mucho por esta zona, quizás me tenga que ir planteando salir en grupo, o circular por otras carreteras con más tráfico. A este paso no vamos a poder salir hacer deporte con tranquilidad. Lamentar estos actos y esperar que no se vuelvan a suceder.
Poco que destacar del siguiente tramo de la ruta. Hasta llegar a Aranjuez son 15 kms de terreno llano, muy favorable para rodar a tope, si se encuentra uno con fuerzas, claro. Sobre las 10,15 de la mañana llego al Palacio Real de Aranjuez, el punto culminante del día. Me encuentro a mitad de ruta, es el momento ideal para hacer un descanso. Siempre que vengo a este sitio, me gusta hacer una visita a los jardines del Príncipe y contemplar el río Tajo desde alguno de sus puentes.
Los últimos kms había estado pedaleando sin sentir los dedos de los pies, es una sensación realmente extraña. Para entrar en calor apliqué radio salil a la planta y a los dedos del pie mientras me hacía un auto masaje. Poco después comencé a encontrarme mejor. También compruebo que llevo el bidón a la mitad de su capacidad, apenas había consumido agua durante los primeros 58 kms. Había llegado hasta este lugar con una media superior a los 25 km/h sin esforzarme demasiado, guardando fuerzas.
Por la calle de la Reina me alejo del centro. Pocos metros más tarde esta calle se convierte en la M-305, una carretera sin arcén durante sus primeros kms, pero adornada a ambos lados de la calzada por unos inmensos arbustos que me protegen en principio de un fuerte viento lateral. Luego, para mi desgracia la carretera cambia el sentido de la marcha y la vegetación desaparece dejandome desnudo ante un enérgico viento de cara. Por suerte el cielo se había despejado casi por completo.
Subida a Villaconejos. |
Llegar a Villaconejos, mi siguiente destino, fue todo un sufrimiento. 13 kms que realice bastante atrancado, viendo como las hojas caídas en el suelo avanzaban contra mi y las ramas de los árboles más altos se movían en dirección contraria a la mía. Esta es una zona que desconocía por completo, no sabía el terreno al que me enfrentaba. Pero antes de llegar a Villaconejos me topé con la subida más dura del día, un repecho de unos 5 kms, con una suave pendiente al 4% de desnivel, nada para asustar, pero unido al fuerte Eolo en contra me hacía ir desgastándome física y mentalmente.
Villaconejos. |
Supongo que se habían mosqueado conmigo por no haberles dado ni un solo relevo durante la subida, pero me fue imposible. Bastante hacía manteniéndome entre ellos. A veces ocurren estas cosas y te encuentras con este tipo de ciclistas. En Villaconejos ellos continuaron hacía Chinchón y yo cambié de dirección hacía Titulcia, así que no volví a verles. Por delante tenía 10 kms con el viento a favor esta vez, un recorrido que se me hizo muy entretenido yendo detrás de un tractor con remolque que no era capaz de alejarse de mi más de 50 metros. En las bajadas se me escapaba y en los repechos le alcanzaba, el conductor se iba descojonando.
Titulcia. |
Puente metalico de Titulcia. |
Llegando a San Martín de la Vega. |
El tramo comprendido entre Ciempozuelos y San Martín de la Vega siempre es mejor hacerlo en compañía. Además las fuertes rachas de viento hacían muy calamitoso mi pedalear, llevando un ritmo bastante pobre. Así pues en cuanto tuve una oportunidad me enganché a un grupito que en esta ocasión me aceptaron, sin que mi compañía les resultara molesta, como debe ser. Hace unos meses me hubiera sido imposible seguir el ritmo de un grupo de ciclistas, pero mi buena condición física y la experiencia que voy cogiendo poco a poco con la flaca me han servido para saber acoplarme y rodar dentro de un pequeño pelotón. Y aunque iban a muy buen ritmo no me fue difícil incrustarme entre ellos y seguir su estela.
San Martín de la Vega |
Subida a La Marañosa. |
La subida a la Marañosa la hicimos a tope. Yo todo el rato detrás de mi nuevo colega. Un tío que llevaba una bicicleta del "año ocho" con las manetas de cambios en el cuadro, de la época de Perico Delgado cuando gano el Tour. Yo al más estilo Greg Lemond, chupando rueda todo el rato, refugiando me de la ventisca que asolaba esta pequeña montaña. Agachando la cabeza, para situarme lo más próximo al cuadro. A mi favor decir que el abuelete que llevaba a mi rueda tampoco fue capaz de dar ningún relevo.
El último km de ascensión tuve que apretar de lo lindo para que no se largará mi "compadre". En la cima 13m 15sg, un discreto tiempo que dadas las circunstancias lo considero aceptable. Aquí no tuve más remedio que parar. Detrás de unos matorrales hice una meada de escandalo. Lastima que mis "colegas" no me esperaran, me hubiera venido de lujo contar con ellos para el resto de la ruta. De todos modos terminé la ascensión con muy buenas sensaciones, dándolo todo, pero satisfecho.
En seguida me puse en marcha, devorando kms por un carril bici que los fines de semana se encuentra atestado de ciclistas y otros usuarios que no deberían circular por aquí. Un día incluso me tropecé con dos féminas montadas a caballo ocupando todo el ancho de la vía. Una actitud irresponsable y peligrosa que además esta completamente prohibida. Este carril bici discurre paralelo a la carretera segregado por un muro de hormigón, bien asfaltado y sin baches es una estupenda forma de evitar el tráfico motorizado, además une las poblaciones de la comarca de las vegas con Getafe y con el sur de Madrid. También existe un proyecto futuro de unir San Martín de la Vega con la población de Morata de Tajuña, aunque los recortes en los presupuestos han paralizado esta opción.
Perales del Rio. |
Cuando monto con la bicicleta de montaña si suelo utilizar este carril bici, pero con la flaca es más lógico es discurrir por carretera. La última parte de la ruta hasta alcanzar el Cerro de los Ángeles es un tramo que no me gusta nada. Mis amigos y yo lo denominamos "tramo pestoso" porque siempre suele dar el aire de cara y el terreno tiende a picar hacía arriba. Hoy con sorpresa me beneficié del viento a favor. Tras superar el polígono industrial y el barrio de Getafe Norte sobre las 13,50 llegué a El Bercial, fin de ruta.
Como todos los años haré un parón de unos tres meses. Allá por el mes de febrero volveré a coger la bici para iniciar la pre-temporada. Estos descansos los tengo como obligatorios para descansar las rodillas y recuperar la motivación. Esta técnica siempre me ha funcionado y los resultados están a la vista, este año me encontrado físicamente muy bien pudiendo realizar rutas con mucho menos esfuerzos. La que más va agradecer este periodo de inactividad será mi mujer que tantos domingos la abandono por la bicicleta.
PERFIL:
TRACK DE LA RUTA:
Hola David, pues buena despedida de temporada.
ResponderEliminarEspero que el parón ciclístico te resulte propício y cargues las pilas para retomar la bici con todas las ganas de mundo.
Un saludo y hasta tu próxima ruta.
Enhorabuena por tu gran año.
ResponderEliminarEsperaré impaciente a tu regreso ;) Y a ver si pedaleamos juntos el año que viene.
Un saludo!
Hola Joserra!. Por mi, sin problema. Con la flaca es mejor salir cuantos más mejor. Por el aire, la velocidad,.... y por si se nos cruzan los "gitanos"..je je je...
EliminarUn saludo. David.
¿No va a ser mucho parón si quieres preparar el Soplao de este año? Si comienzas a entrenar otra vez en Marzo se me hacen pocos días para estar a tope...
ResponderEliminarHola David!. El año que viene me motiva hacer el soplao, pero no me voy a volver loco haciendo un entrenamiento especifico ni rutas kilométricas a lo bestia. Simplemente seguiré saliendo en bici como siempre, haciendo las rutas que me interesen y si en abril me veo con animo y fuerzas me alistaré al "infierno cántabro". Además según he leido el soplao cambiará su recorrido para el 2013, (más largo y duro), creo que unos 15 kms más y 500 metros más de desnivel. Creo que francamente me viene "grande". Yo tardé 15 horas, es demasiado. Pero no lo descarto.
EliminarPor circunstancias solo puedo permitirme una salida de este tipo al año, igual apuesto por hacer La maraton de los monegros anteponiéndolo al soplao. Ya veremos...
Un saludo, David.